domingo, 9 de diciembre de 2012

EL TREN DE LAS OPORTUNIDADES

Nunca dejes pasar una oportunidad que te haga feliz a ti, aunque a los demás no les guste.
¡¡Oportunidades, haberlas haylas!!

Según Gregg Braden, conocedor de grandes misterios...
La ciencia cuántica sugiere la existencia de muchos futuros posibles para cada momento de nuestra vida. Cada futuro se encuentra en un estado latente hasta que lo despertamos gracias a las elecciones que realizamos en el presente...
¡Interesante!...¿No crees?

Imagina un tren. Sale en estos momentos de una estación desconocida...destino: tu vida.
El tren va cargado de oportunidades, pero hay una que urge y se aloja justo en el vagón que lleva tu nombre.
Como en todo viaje que se tercie, hay una hora de salida y una de llegada.
¡El tiempo sólo es eso, tiempo!
Se escuchan los silbatos y la máquina se pone en marcha...
Se cierran las puertas y curiosamente la estación se queda desierta.
El tren inicia su camino y en cada parada suceden muchas anécdotas ...
Cada quien aguarda su destino...

Sabrás de forma intuitiva la hora de su llegada...
Sentirás una especie de remolino en el estómago...
Una sensación emocionante y a la vez; dudas, muchas dudas...
Una pregunta en tu cabeza golpea sin cesar...
¿Que debo hacer?
El corazón te pide que vivas, que inicies de una vez por todas la aventura...
Tu mente, te da razones para que seas sensato.

¡Escucha!
Ya se acerca...La gente se arremolina.

El tren se detiene frente a las casas y entonces, tus ojos buscan inquietos "el vagón"
¡Ahí está! tu nombre con letras bien grandes...
Tus piernas flaquean...aunque la emoción y las ansias por un futuro mejor, te obligan a moverte...
Andas unos pasos...
Tomas la barandilla con fuerza y como por inercia, te adentras en el compartimento...
Tomas asiento, respiras profundamente,
...Y piensas. ¡Es lo correcto!

Recuerda que si el tren no alberga pasajero alguno, partirá irremediablemente, con su abanico de posibles resultados.

Las oportunidades son como los amaneceres, si uno espera demasiado, se los pierde.
      William George Ward

¡¡PASAJEROS AL TREN...!!

¡Felíz viaje chicos!